Durante muchos años, en España, la Formación Profesional ha sido vista como el lugar donde iban los estudiantes que no valían para estudiar. Se ha luchado contra éste sambenito, las leyes educativas lo han ido subsanando hasta nuestros días… hasta la actualidad.
Hace unos días se filtró que el Ministerio de Educación prepara un anteproyecto de ley para crear un curso de Formación Profesional de tauromaquia.
Volviendo al inicio de la entrada de hoy, el hecho de que la Formación Profesional no éste tan bien considerada como se merecería fue debido a la Ley General de Educación, una ley educativa franquísta de 1970 que entre otras cosas, estableció la enseñanza obligatoria hasta los catorce años. Tras ocho años de Educación General Básica, se accedía al llamado Bachillerato Unificado Polivalente (BUP), o a FP (Formación Profesional). Mientras que para acceder al BUP debías tener superada la EGB, para entrar en la FP solamente necesitabas ser mayor de catorce años. Es decir que podías estudiar FP sin haber superado la EGB.
Esto fue así, hasta que en 1990, veinte años más tarde, apareció la LOGSE, fijó la enseñanza obligatoria hasta los dieciséis años y equiparó el Bachillerato con la Formación Profesional, requiriendo en ambos casos la obtención del título de la ESO.
Esto provoca que, aún a día de hoy, la Formación Profesional no esté tan bien valorada en España como en el resto de países europeos, donde es considerada la opción más importante en la Educación Terciaria con el 70% de los estudiantes egresados de la ESO.
Actualmente, la LOMCE ha vuelto a modificar la Formación Profesional, creando de nuevo una Formación Profesional donde se pueda acceder sin tener el título de la ESO. Y en esta Formación Profesional Básica pretende crear un curso llamado Tauromaquia y Actividades Auxiliares Ganaderas. Es decir, el Estado quiere dar formación reglada a toreros, picaderos y banderilleros.
La noticia de que el Ministerio de Educación y Cultura haya elaborado un anteproyecto para la creación de un título de FP básica en Tauromaquia ha despertado muchas suspicacias en todo el país, mucha gente lo ve como una maniobra a la desesperada por parte del Gobierno central para seguir protegiendo al mundo taurino y asegurar su continuidad.
La decisión de Educación llega en un momento en que los gobiernos de izquierdas de Baleares y la Comunidad Valenciana se planean seguir la senda de Cataluña y Canarias y vetar las corridas de toros. Además, a finales de septiembre, el Ayuntamiento de Madrid, gobernado por Manuela Carmena, quitaba la subvención a la Escuela de Tauromaquia, que contaba con únicamente 38 alumnos.
En el proyecto educativo del ministerio se incluye desde la lidia a la liturgia taurina y las “suertes del toreo”, la “casta” y la “pureza” de las corridas y de los animales. Destaca un módulo de 100 horas que incluye el “toreo de capote”; la “suerte de banderillas y sus colores idenficativos”; el “toreo de muleta”, que enseña a los alumnos a “citar, parar, templar y mandar”, y la preparación física del torero, picador y banderillero. De este modo, la de torero será una profesión equiparable a la de especialista en tratamiento de la madera, jardinería o ceramista, otros títulos de FP básica.
Personalmente, y por si no quedó claro en estas lineas, la propuesta me parece aberrante. No entiendo que aún hoy en día esté vigente una «tradición» tan cruel como son las corridas de toros, y aunque aplaudí con entusiasmo cuando el Parlament de Catalunya prohibió tales espectáculos, se quedaron cortos al permitir otros eventos donde participan toros. No entiendo como el ser humano pueda disfrutar viendo sufrir de ese modo a los animales y me parece irónico que los que dicen amar a los toros sean los que los matan brutalmente en medio de la plaza.
Como apunte final, quiero compartir con vosotros las sabias palabras con las que el torero Alejandro Talavante responde la pregunta sobre si el toro es amigo o enemigo…
«El toro es un toro…y no puede ser tu amigo porque no habla y tampoco tu enemigo porque tampoco habla».
Aprendiendo a aprender 
Estoy contigo: aberrante. No se puede calificar como profesión un acto retrógrado y cruel. Es literalmente un curso para maltratar animales. No acepto ningún espectáculo con animales, ni con muerte ni sin ella. Me parece increíble que en vez de avanzar y abolir ésta barbaridad, les conceden facilidades para desarrollar su violencia… No puede considerarse una profesión algo así, cuando se están cambiando leyes para proteger la dignidad animal en otros ámbitos. El vídeo demuestra la lógica e inteligencia de estos personajes, incultos, que inventan que eso es cultura. Lo peor es que mueven mucho dinero e intereses este tipo de espectáculos… Espero que llegue el día que desde arriba (UE), se nos obligue a erradicar estas prácticas. Por cierto, corre por ahí una recogida de firmas para que retiren estos cursos, ahora no lo encuentro, pero creo que era en Change.org 😉
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Creo que la tauromaquia caerá sola. Cada vez es menor el interés social que despiertan, pero hacen mucho ruido.
Esto no quiere decir que no esté claramente en contra. Creo que quien se atreva a prohibir los toros a nivel nacional se ganará muchas críticas, pero ganará muchos más partidarios a su causa. Creo que no hay regeneración entre sus aficionados, y lo que antes atraía turistas ahora los asquea y traumatiza.
No creo que más de cincuenta personas se matriculen a ésta FP, creo que éste curso quedará en un recuerdo anecdótico (anecdótico, humillante, vergonzoso y aberrante) del gobierno actual al ver peligrar su puesto.
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Eso espero… ¡que se extingan!
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